Les quiero contar lo que viví el día de ayer, que de verdad me dio tanta tristeza y hasta coraje, ver la educación y cultura en la que vivimos, teniendo todo para ser un país primer-mundista (creo yo), la cultura es la que no nos deja avanzar.
Primero que nada les resumo un poco de mi para los que nos saben, he tenido tres cirugías de cadera por consecuencia de un padecimiento llamado «legg Calvé Perthes» y hace 4 meses tuve un accidente en mi auto de carreras, esto derivó en una operación de rodillas, el 10 de Agosto operaron mis dos rodillas, entonces, la suma de estas dos cosas, provocan que aún no pueda caminar mucho, ni estar mucho tiempo parada, a pesar de que he avanzado muy rápido en mi recuperación aún me duele bastante hacer estas actividades. Bueno, pues dicho esto, ahora si les cuento mi anécdota.
Hace unos meses compré un patín eléctrico, (el que ven en la foto) para poder regresar a ciertas actividades de trabajo y moverme con mayor facilidad, por ejemplo en los autódromos, en donde que hay que caminar distancias largas (para mí al menos).
El día de ayer, Martes 28 de Noviembre, fuimos a la FIL, mi novio y yo, emocionados por que teníamos una lista de libros por comprar, por cierto. Llevamos mi patín eléctrico para no cansarme y poder disfrutar el recorrido y las compras, ah y cabe mencionar que antes de ir, un amigo que estaba en la FIL en su stand, nos hizo el favor de preguntar, y le comentaron que no había problema de que llevara mi patín. Y bueno pues llegamos y entrando nos alcanzó la gente de seguridad para decirnos que no podíamos entrar con el patín, y les comentamos que ya habíamos preguntado antes de ir, por cuestión de mi condición, y dijeron que entonces fueramos por una silla de ruedas. Lo cual es una buena opción, sin embargo, he tenido malas experiencias en tiendas departamentales, las sillas terminan lastimando mas mi cadera, argumentamos eso, explicándoles que es mi medio de movilidad, que no tiene por que ser una silla de ruedas, y dijeron que pasáramos a dirección para pedir autorización. Nos dirigimos a las oficinas de dirección de la FIL y estaba una joven, parecía de seguridad, y le comentamos que necesitábamos hablar con dirección para que nos autorizaran usar el patín, ella subió y bajó para decirnos que no podíamos usar el patín, a lo que le dije, que les hiciera saber que eso era discriminación, ella reaccionó asombrada, entonces mi novio le explicó las razones por las que uso el patín, la chava se disculpó y le dijo a mi novio que por favor pasara a explicarles la situación. En menos de dos minutos estaba bajando mi novio acompañado de la asistente de dirección, Erika, súper amable y comprensiva nos dijo que adelante que solo tomaría una foto del patín para hacerla llegar al personal y no nos estuvieran molestando en nuestro recorrido. Tranquilos nos fuimos y empezamos nuestro recorrido, pero de verdad no saben como la gente me miraba y me miraba, algunos reían, algunos decían que chido, otros con cara de extrañeza y pues bueno así fue hasta que llegamos al stand de Kabbalah, compramos nuestros libros, estábamos pagando y un joven con el mismo uniforme que la chava que nos recibió al llegar a dirección de la FIL me dijo: «Disculpa no puedes usar el patín aquí», le contesté: «Tenemos autorización de dirección, de Erika la asistente» y se fue, terminamos de pagar, ya nos íbamos, y llegaron dos personas de seguridad, si DOS, como si fuera delincuente y me dijeron que no podía usar el patín, les volví a comentar lo mismo de que teníamos autorización y les dije mi condición, y ellos firmes en que no podía usarlo que podía golpear a alguien, le dije «¿Tú crees que lo traigo para divertirme?» y le volví a explicar lo de mis operaciones, la verdad ya muy molesta, por que querían que fuéramos a dirección otra vez a que ellos verificaran que estábamos diciendo la verdad. ¿Pueden creerlo? por sentido común no creo que una chava de 31 años quiera andar paseándose por ahí en un patín, solo por diversión o flojera, y estar soportando las miradas de todos, por que ahí aumentaron, imagínense siendo perseguida o guiada por seguridad, como si fuera un vil delincuente, no saben lo feo que se siente. Estas personas de seguridad nos siguieron por poco mas de medio camino, antes de llegar a la oficinas, de repente ya no estaban.
Entiendo que estas personas solo hacían su trabajo, y ellos solo siguen ordenes, pero me pregunto… ¿no tienen sentido común?.
La verdad es que la pasamos muy mal, decidimos irnos, de verdad que estábamos tristes de haber vivido eso, ¿Cómo es posible que la gente no tenga sentido común? ¿Por qué no somos mas abiertos, por que tenemos que hostigar con la mirada a la gente que puede parecer «diferente»? ¿POR QUÉ? ¿Por qué no podemos usar un medio de transporte diferente a una silla de ruedas o un carrito de discapacitado?.
Les cuento esto por que me gustaría ayudar a tomar conciencia, yo puedo caminar, y hacer muchas cosas por mi misma y paso por esto de vez en cuando, pero hay muchas otras personas que es su día a día, no se vale, si no ayudas, OK, pero deja de mirar con morbo a la persona «diferente» y antes de juzgar, infórmate, si es que es tu papel, como el caso de la seguridad de la FIL.
Gracias por leerme, compartan y ayudemos a hacer conciencia es por el bien de todos.
P.D. Gracias a Erika, asistente de dirección de la FIL por su amable atención.
Samira Rached
Animo Samira, desgraciadamente como dices, falta mucha cultura o nos asemos pe#d&@$,los discapacitados son los más vulnerables a esta sociedad degradada , falta de cultura y educación más que nada, y que hablar de los de seguridad llámese,Privada o no dejan mucho que desear,. Saludos y ánimo te toco a ti , pero a las personas que no se saben defender ,imagite cuántas son ..
Pues si! así pasa tristemente.
Saludos
Podria llamarle, falta de informaciòn, conciencia, cultura o empatia por las necesidades del otro.
!Pero eso no es justificaciòn para su proceder!
!Sigue adelante! =)
Exacto ! Gracias un abrazo